Hola a todos, el día de hoy les comparto un artículo que nos habla de la CREATIVIDAD DURANTE EL CONFINAMIENTO: ¿CÓMO DESARROLLAMOS ESTA CAPACIDAD?, primero debemos saber que todos somos creativos y que la creatividad necesita tiempo, esta capacidad se puede entrenar y desarrollar. Entre los consejos para tener una familia creativa, tenemos que hay que predicar con el ejemplo, tener un estilo educativo firme y amable, aceptar el cuestionamiento, conocer a nuestros hijos, que tenga juego libre y tiempos vacíos, hacer actividades creativas en familia, tener espacios estimulantes, entre otros.
Durante este confinamiento la faceta creativa de muchas familias está saliendo a relucir, sin embargo, son muchos los que se preguntan de dónde sale tanta creatividad y cómo pueden desarrollar la suya. ¿Se puede aprender a ser creativo? Te lo contamos.
Todas estas semanas de confinamiento nos están mostrando lo mejor y lo peor del ser humano… Pero centrémonos en lo bueno. Aparte de la solidaridad, si de algo tenemos muestras para dar y tomar, es del ingenio de la gente. No pasa un día sin que las redes sociales o los medios de comunicación nos muestren una selección de las ideas más divertidas, originales y tiernas. Esta explosión de creatividad viene a confirmar dos tesis básicas acerca del pensamiento creativo:
- Todos somos creativos.
- La creatividad necesita tiempo.
¿Acaso las personas que hacen esas cosas tan graciosas son especiales o distintas de nosotros? Rotundamente no, de hecho estamos comprobando que cualquier familia, cualquier niño, abuelo o adolescente, es capaz de grandes ocurrencias.
La creatividad es una capacidad más de nuestra inteligencia, que todos poseemos y que se puede entrenar y desarrollar. La creatividad puede convertirse en un hábito.
¿Qué es lo que pasa ahora, qué está marcando la diferencia? El tiempo libre. Las buenas ideas no surgen de la nada, por un acto repentino de iluminación. Puede parecerlo, porque los procesos que culminan con la aparición de un resultado creativo son invisibles y silenciosos. Tienen lugar en los mecanismos de nuestra mente y no solemos ser conscientes de ellos ni percibirlos desde fuera. Pero las ideas se incuban y, para que lleguen a término, requieren tiempo. Este factor se ve alimentado por el aburrimiento. Se sabe que el aburrimiento conduce a la creatividad, y el momento que estamos viviendo así lo corrobora.
Mucho tiempo por delante, en muchos casos menos obligaciones, limitaciones espaciales… es el caldo de cultivo perfecto para los arrebatos creativos.
Sin embargo, y en contra de lo que suele creerse, la creatividad no está relacionada solo con las producciones artísticas, sino que tiene más que ver con la resolución de problemas y la adaptación a los cambios. Por eso es una destreza importante que debemos cultivar. Para el filósofo, escritor y pedagogo José Antonio Marina, Presidente de la Universidad de Padres, la creatividad es la capacidad de resolver problemas nuevos, a los que nunca nos hemos enfrentado, o de resolver problemas antiguos empleando nuevas estrategias.
En el estudio de la creatividad se habla de un tipo de creatividad, la ‘little creativity’ o creatividad de la vida cotidiana, que nos ayuda a superar las pequeñas dificultades del día a día. Todos somos creativos, aunque muchas veces no nos demos cuenta.
¿Tú también quieres ser más creativo y fomentar esta capacidad en tus hijos? Te ofrecemos unos sencillos consejos para que formes una familia creativa: